Drogas
sedantes-hipnóticas
Una droga
sedante-hipnóticas o soporíficas
son aquellas cuya primera función es la inducción al sueño. Pueden producir, según qué tipo de
sedantes-hipnóticos, insomnio, ansiedad, confusión, desorientación, depresión
respiratoria, pérdida de equilibrio, disminución del juicio, o muerte.
Este
grupo se subdivide a su vez en subgrupos: GABA-Agonistas, H1 Agonistas-inversos, α1 adrenérgicos
antagonistas, α2 adrenérgicos
antagonistas, agonistas melatoníticos y antagonístas orexiníticos.
Drogas alucinógenas
Una droga
alucinógena es aquella droga que produce cambios en la percepción, consciencia,
emoción o ambos.
Psicodélicos
Producen
una alteración en la cognición y la percepción. Las experiencias suelen asociarse a la
meditación, el yoga, el trance o el sueño. Los psiquedélicos suelen agruparse
en Lisergamidas (destaca el LSD), Feniletilaminas, Piperazina, Triptaminas y otros.
Disociativos
Producen
un bloqueo de las señales de la mente consciente hacia otras partes del cerebro
produciendo alucinaciones, privación sensorial, disociación y trance. Pueden
producir también sedación, depresión respiratoria, analgesia, anestesia o ataxia, así
como pérdida de las facultades mentales y la memoria.
Delirantes
Producen delirios, a diferencia de los alucinógenos psiquedélicos y
disociativos en el que se mantiene cierto estado de consciencia.
Drogas anestésicas
Una droga anestésica es aquella que produce anestesia generalizada o local. Puede producir además
molestias de garganta, náuseas o vómitos, mareos, cefaleas o muerte.
Este
grupo se divide en subgrupos: etéreos, haloalcanos, opioides y esteroides neuroactivos; inyectables o inhalables.
Drogas antipsicóticas
Una droga
antipsicótica es aquella que produce un alivio en los síntomas de la psicosis. Pueden producir ganancia de peso, agranulocitosis, discinesia, acatisia, distonía, parkinson, hipotensión, taquicardia, letargia, pesadillas, hiperprolactinemia o Disfunción eréctil.
Este
grupo se divide en subgrupos: Benzamidas, Butirofenonas, Difenilbutilpiperidinas, fenotiazinas, Tioxantinas, tricíclicos, benzamidas, piperidinas de benzisoxazola, piperazinas de
benzotiazoles y otros menos comunes.
Drogas antidepresivas
Una droga
antidepresiva es aquella que produce un alivio en los síntomas de la depresión, la distimia, ansiedad; y en general todos los trastornos del estado de ánimo y la fobia social.
Este
grupo se subdivide en: Inhibidores de la recaptación selectiva, potenciadores de la recaptación selectiva,
agentes de la liberación selectiva, antagonistas de los receptores, inhibidores
de la recaptación, antidepresivos bicíclicos, antidepresivos tricíclicos,
antidepresivos tetracíclicos, antidepresivos heterocíclicos, inhibidores de la monoaminooxidasa, agonistas de los receptores 5-HT1A
Drogas ansiolíticas
Una droga ansiolítica es aquella utilizada para el tratamiento de la ansiedad y sus desórdenes. Son considerados tranquilizantes
menores. Pueden producir taquicardia, pesadillas o pérdida de la consciencia.
Este
grupo se divide en:receptores GABAA, agonistas de los receptores 5-HT1A, antagonistas de la histamina (antihistamínico), antagonistas
de la liberación de la corticotropina, antagonistas de la taquicinina, antagonistas de
la melanina, etc.
Drogas euforizantes
Una droga
euforizante es aquella que induce a sentimientos de euforia. Los
efectos pueden incluir relajación, control del estrés, felicidad o placer; ya
que pueden actuar sobre los centros de placer del cerebro.
Existen
dos tipos de euforizantes: Estimulantes, opioides, depresores y alucinógenos.
El ámbito de acción de estas drogas es generalizado encontrándose en varios
tipos de drogas psicotrópicas.
Drogas antiparkinsonianas
Las
drogas antiparkinsonianas son aquellas drogas que tratan los síntomas del parkinson. Producen efectos adversos como hipotensión, arrítimias, nauseas, pérdida
de pelo, ansiedad, alucinaciones, somnolencia, problemas respiratorios,
desorientación, confusión y psicosis.
Drogas nootrópicas
Las
drogas nootrópicas son aquellas que incrementan las
funciones mentales, como la cognición, la memoria, la atención, o aumentan la motivación o la concentración. Son referidos generalmente
como psicoestimulantes. Este grupo incluye los Simpaticomiméticos, las Xantinas, los Eugeroicos, los antagonistas de la H3, los agonistas inversos de GABAA,
los agonistas de la Dopamina D1, los agonistas de la nicotina α7, los inhibidores de la prolil
endopeptidasa, los agonistas α-adrenérgicos y los antioxidantes, entre otros.
Drogas analgésicas
Las
drogas analgésicas o analgésicos son aquellas drogas que reducen o inhiben el dolor.
Los
analgésicos se dividen en: Opioides, pirazolonas, cannabinoides, anilinas y antiinflamatorios no esteroideos.
Los
analgésicos utilizados para tratar el dolor dependerán de la intensidad y
características propias del dolor. Para dolores leves suelen utilizarse los AINEs, que
además de tratar el dolor y reducen la fiebre, y en grandes dosis, tienen
efectos antiinflamatorios. No obstante, este tipo de sustancias tienen un techo
analgésico bajo, el cual no puede ser traspasado ni en mayores dosis ni en combinación
con otras drogas del mismo tipo. No tienen un potencial de dependencia física
elevado, por lo que su venta es libre en la mayoría de países. Para el alivio
de dolores de intensidad moderada se utilizan opioides débiles, de distribución no libre, como el Tramadol, la Codeína o la Hidrocodona. Para dolores de intensidad fuerte se utilizan
opioides fuertes como la Morfina, la hidromorfona, la Metadona, el Fentanilo, etc. Estas sustancias no tienen techo analgésico,
existiendo solamente un techo toxicológico.
Drogas anoréxicas
Las
drogas anoréxicas o antiobésicas son aquellas que suprimen o reducen el apetito. Suelen utilizarse para reducir peso.
Este tipo de drogas se dividen en: Estimulantes y anti-cannabinoides.
La mayoría de estimulantes suprimen el apetito, y de hecho, la droga más
consumida del mundo, el café,[12] es un
potente supresor del hambre.[13] Los
cannabinoides tienen la capacidad de estimular los receptores cannabinoides CB1 y CB2, que incrementan el apetito.
Aquellas sustancias antagonistas y agonistas inversas
de estos receptores producirían el efecto contrario, esto es, la disminución o
la supresión el apetito, como sucede con el Rimonabant o el Surinabant. No
obstante, el consumo excesivo de THC produce el efecto contrario al de un
consumo moderado, ya que en un consumo normal la activación de los receptores
cannabinoides CB1 se produce a nivel de las neuronas excitadoras glutamatérgicas mientras
que un consumo mayor produciría la estimulación de los receptores cannabinoides
CB1 en las neuronas inhibidoras GABAérgicas del estriado ventral.